Cuando el joven Reynaldo Luza Argaluza (1893 – 1978) decide mudarse a Nueva York en busca de un mejor destino, no contaba con propuesta alguna ni mayor oficio que su innata cualidad de eximio dibujante, la cual ya había mostrado en nuestro medio a través de sus extraordinarias caricaturas publicadas por revistas de la época como Variedades, Cultura y Monos y Monadas.
El destino se encargó de abrirle las puertas de la fama y él de reconocer esa oportunidad: al poco tiempo de residir en Nueva York se le presentó la propuesta de un publicista desesperado por cumplir con su editor, teniendo que diseñar un aviso publicitario durante una noche para la Revista Vogue.
Ese primer dibujo le significó su permanencia como diseñador del mencionado publicista; las periódicas publicaciones de sus dibujos en la Revista Vogue, logrando figuración en varias de sus carátulas; para luego ser contratado como miembro de la misma y posteriormente ser captado por la revista de la competencia Harper´s Bazaar, en la que permaneció durante aproximadamente 30 años, constituyéndose en su Director Artístico, gracias a la calidad de sus dibujos, su sentido artístico y amplitud de criterio.
La vasta obra artística de Reynaldo Luza se nutrió de amplias y variadas influencias, desde su afición por la fotografía inculcada por su amigo José María Eguren en épocas de su niñez -pasando por las de sus coetáneos colaboradores del grupo Colónida en sus reuniones del Palais Concert- hasta de sus relaciones profesionales y amicales con los personajes influyentes de la moda y el arte en América del Norte y Europa de inicios del siglo XX, como Heywoth Campbell, Director de la Revista Vogue; la joven diseñadora Hattie Carnagie; el extraordinario fotógrafo Barón Adolf de Meyer, considerado el padre de la fotografía de modas; el fotógrafo surrealista Man Ray; el joven pintor Salvador Dalí; Max Ernst, Jacques Cocteau, entre otras relevantes personalidades de las vanguardias europeas de entonces.
Trabajó con diseñadores como Coco Channel, Jean Patou y Madeleine Vionnet, entre muchas otras personalidades directrices del devenir de la moda internacional.
Todo esto fue asimiliado, procesado y plasmado por el artista Reynaldo Luza a través de sus múltiples y variadas manifestaciones artísticas como ilustrador de modas, diseñador, retratista de artistas y damas de sociedad, pintor de óleos, escenógrafo, decorador y fotógrafo; lo cual le valió en vida su gran reconocimiento como una celebridad internacional, habiendo además sido premiado con la Condecoración de la Orden del Sol del Perú con el Grado de Caballero, otorgada en 1945 por el Gobierno del Perú, en mérito a su destacada obra de renombre internacional.
Los dibujos de Reynaldo Luza que presentamos en esta exposición son reproducciones digitales provenientes de una selección de ocho dibujos originales del archivo personal del artista, escaneados, restaurados e impresos por Atelier Fotolaser, a solicitud, mediante el sistema de inyección de tintas a color sobre papeles de fibra de algodón Ultrasmooth Fine Art Paper de 260 grs.
Estas ilustraciones, impresas en ediciones limitadas, han sido puestas a la venta por su editor en dos Portafolios A y B, constituídos por 4 ilustracaciones cada uno más una de obsequio, titulada por el autor «Feliz 1921″. Las ilustraciones, nominadas con el prefijo de la letra que identifica al Portafolio al cual pertenecen, son de tamaños aproximados a 30×40 cms. según sea la proporción de las medidas de sus originales.
Miraflores, 5 de mayo del 2015